EN EL OSCURO ARMARIO
¿Mi poemario? En el oscuro armario
resguardo a buen recaudo mis escritos.
Insisto en apostar al solitario
mis dones de poeta pequeñito.
Hace falta otro don del que dispongo.
Y pongo a un dios ateo por testigo
que lo que digo es cierto. No propongo
más juego que lidiar con mi castigo:
jamás hallé mi voz, si es que la tengo.
¿Es verdad mi verdad, o es trampantoja?
Me apaño con lo poco que poseo.
Me amaño, me autoengaño, me entretengo
mientras tanto a una musa se le antoja
sacarme por volandas de paseo.
No hay comentarios:
Publicar un comentario