lunes, 25 de abril de 2022

Soneto 208

 BUSCANDO ALGÚN INDICIO


Quién te ampara al cesar la luz del rayo.

Estás solo entre tú y el precipicio.

Quién puede devolverte a aquel inicio.

Quién se atreve a cruzar un nuevo mayo.


Estás solo en lo oscuro. Y en desmayo

noctámbulo, buscando algún indicio,

calibras la ilusión en el resquicio

de una puerta que se abre de soslayo:


"En su cuerpo orillábanse los álamos,

cundía el cáñamo, espejaba el río

blanduras entre adelfas y laurel."


Luciérnagas ingenuas sobre el tálamo,

semejando su luz. Y en extravío

un corazón de acíbar y de hiel.

martes, 19 de abril de 2022

Soneto 207

CIELO Y TIERRA


De mi alma por las hondas paredes,

escondidas, cruzan vetas de oro.

Cierta luz surge a veces por los poros

de mi piel. Luz de sol tejiendo redes


de rocío y jazmín y de clavel.

Y si acaso mi boca -un suponer-

vuelve a abrirse en tan alto amanecer,

será río en abril, un cascabel,


un canto a la memoria en armoniosas

palabras de consuelo. No hay olvido.

Despiertan los almendros en la sierra.


Clava el tiempo su aguja poderosa

en la diana de aquel placer prohibido.

Tu boca fue mi cielo y fue mi tierra.

miércoles, 6 de abril de 2022

Soneto 206

CATALEPSIA


Han plantado dos árboles simbólicos.

Siendo honesto ese asunto me conmueve.

Para todos los árboles hoy llueve.

Se acrecienta el misterio en lo bucólico.


Para todos los árboles el agua,

libremente, ignorando lo humano

y sus políticas, tiende su mano.

Por su mano lo humano se desagua.


Pierde interés, lo deja en cualquier cosa:

sinfín de controversias egoístas,

perfil de vanidades de ultratumba.


Sume y siga la lluvia por la fosa

de la raíz profunda y hedonista.

Y el libre pensamiento no sucumba.

lunes, 4 de abril de 2022

Soneto 205

 JAZMINES EN CONSERVA


Entre todas las ciencias la poesía

es la más singular de todas ellas:

sin cohete te lleva a las estrellas,

sin taller recompone tu avería.


Entre todas las artes la poesía

es la más peculiar de todas ellas:

convierte los espinos en grosellas,

transforma el vericueto en autovía.


No precisa herramienta en su labor;

no precisa de estudio ni materia;

no precisa de título o diploma.


Es maestra en la muerte y el amor.

Una veces risueña, otras seria.

De formol y jazmines tiene aroma.

Soneto 227