HOMBRES DE MAÍZ, para Miguel Ángel Asturias por su novela.
Llegar aquí recién amanecido.
Sentir tremendas ganas de escribir.
Un manojo de ideas concebir.
Y el canto de la tórtola en tu oído.
Diminuto te sientes, forajido,
inmigrante ilegal del existir.
Un boceto en el cuadro del vivir.
Un fantasma, un espíritu dormido.
Y quieres regresar a tus orígenes.
Al sueño poderoso de las vírgenes
tierras entre lavas y selva ruda.
Al barro, al cazador, al pedernal,
a la danza del viento en el trigal.
Mazorcas de maíz y carne cruda.